
Los aceites esenciales han dejado de ser un secreto de herbolarios y naturistas para convertirse en una herramienta poderosa y versátil al alcance de todos. Ya sea que estés buscando relajarte, concentrarte, dormir plenamente o simplemente sentirte mejor en tu día a día, los aceites esenciales pueden ser tus grandes aliados.
Pero… ¿Para qué sirven los aceites esenciales?¿realmente funcionan? ¿Cuáles son los mejores? ¿Cómo se usan? En este artículo te voy a contar TODO lo que necesitas saber, con información útil, concreta y basada tanto en estudios como en mi experiencia personal.
Los aceites esenciales son compuestos aromáticos naturales altamente concentrados, que se extraen de distintas partes de las plantas: flores, hojas, cortezas, raíces, semillas y frutos. Su obtención puede hacerse mediante diferentes métodos, siendo la destilación al vapor y la presión en frío los más comunes. Cada gota de aceite esencial representa la esencia misma de la planta, tanto por su aroma como por sus propiedades terapéuticas y bioquímicas.
Lejos de ser una moda pasajera, el uso de aceites esenciales tiene una larga trayectoria histórica. Civilizaciones antiguas como la egipcia, la china, la india y la griega ya los empleaban con fines medicinales, espirituales y cosméticos. En los rituales de momificación, en baños relajantes, en masajes curativos o como parte de ceremonias religiosas, estos extractos vegetales ocupaban un lugar privilegiado. De hecho, se han encontrado jeroglíficos y textos antiguos que describen mezclas de aceites con propósitos curativos, emocionales y energéticos.
Lo interesante es cómo ese conocimiento ancestral ha resurgido con fuerza en pleno siglo XXI. Vivimos en una era marcada por el estrés, la velocidad y la desconexión con nuestro cuerpo y emociones. En este contexto, los aceites esenciales han vuelto a cobrar protagonismo como una herramienta sencilla, natural y efectiva para recuperar el equilibrio. No es casual que cada vez más personas se interesen por la aromaterapia como terapia natural, buscando soluciones más holísticas, libres de químicos y alineadas con el autocuidado consciente.
Hoy, la aromaterapia se aplica en entornos terapéuticos o spas, así como en hogares, oficinas, gimnasios y hasta en hospitales. Su versatilidad es tal que puede adaptarse tanto a rutinas de relajación como a tratamientos complementarios para el insomnio, la ansiedad, dolores físicos o problemas respiratorios. Todo esto sin efectos secundarios agresivos ni procesos invasivos.
Es cierto que los aceites esenciales no son una cura milagrosa ni reemplazan tratamientos médicos cuando estos son necesarios. Pero su capacidad para influir en nuestro estado de ánimo, modular nuestras emociones, mejorar nuestra energía y contribuir al bienestar físico está ampliamente documentada, tanto por estudios científicos como por millones de testimonios personales.
En resumen, los aceites esenciales son mucho más que aromas agradables. Son herramientas potentes de bienestar integral que, usadas con conocimiento y respeto, pueden transformar nuestro día a día de forma sutil pero profunda.
Principales beneficios de los aceites esenciales en tu día a día

Volvamos a la pregunta del principio. ¿Para qué sirven los aceites esenciales? La respuesta corta: para muchísimo. Dependiendo del tipo de aceite, pueden ayudarte a:
- Relajarte y combatir el estrés.
- Dormir mejor.
- Despejar la mente y mejorar la concentración.
- Aliviar dolores musculares o de cabeza.
- Elevar el ánimo y reducir la ansiedad.
- Descongestionar las vías respiratorias.
- Mejorar el aspecto de la piel.
- Purificar el aire y crear ambientes armoniosos.
En mi caso, empecé con la aromaterapia por pura curiosidad… y porque necesitaba un respiro mental y poder descansar mejor por las noches. Hoy, después de años usando aceites esenciales, puedo decir que han sido grandes aliados para mi bienestar físico y emocional. No son magia, pero funcionan, y mucho.
Los beneficios son múltiples, pero lo más importante es aprender a elegir bien, y usarlos correctamente para que realmente marquen una diferencia en tu vida.
Cómo usar los aceites esenciales según tus necesidades

Una de las grandes ventajas de los aceites esenciales es su versatilidad. No importa si estás buscando relajarte, concentrarte, mejorar el ánimo, aliviar dolores o simplemente purificar el ambiente: siempre hay una forma adecuada de incorporarlos en tu rutina. Y lo mejor es que puedes adaptar su uso según lo que necesites en ese momento.
1. Difusor o humidificador
Esta es probablemente la forma más popular y sencilla de disfrutar los beneficios de la aromaterapia. Basta con añadir entre 5 y 10 gotas de tu aceite esencial favorito en el agua del difusor para llenar el espacio de un aroma agradable y terapéutico. Es ideal para crear ambientes relajantes, ayudarte a dormir, elevar el ánimo o incluso estimular la concentración.
En mi caso, el difusor se ha vuelto parte esencial de mi rutina nocturna. Uso lavanda antes de acostarme y la diferencia es abismal: más calma, más profundidad en el sueño, menos vueltas en la cama. En épocas de estrés, simplemente tener ese aroma flotando en el ambiente cambia mi estado de ánimo por completo.
2. Aplicación tópica
Aplicar aceites esenciales sobre la piel permite una absorción más directa de sus compuestos. Eso sí: nunca deben aplicarse puros. Siempre hay que diluirlos en un aceite portador como el de coco, almendra o jojoba. Una vez diluido, puedes usarlos en masajes, zonas con tensión muscular, puntos energéticos (como las sienes o muñecas) o incluso como parte de tu rutina de cuidado de la piel.
Personalmente, el aceite de menta es mi favorito para masajes. Cuando me siento agotado físicamente o con tensión en cuello y hombros, lo aplico con un poco de aceite de almendra… y el alivio es casi inmediato.
3. Inhalación directa
Cuando no tienes difusor o necesitas un alivio rápido, la inhalación directa es una excelente opción. Abres el frasquito, lo acercas a la nariz e inhalas profundamente unas cuantas veces. También puedes aplicar una gota en un pañuelo, en la palma de la mano (bien diluida) o incluso en la muñeca. Es ideal para despejar la mente, calmar la ansiedad o aliviar dolores de cabeza.
Yo recurro mucho a esta técnica con el aceite de menta. Solo con inhalarlo siento cómo se despeja la mente y se alivia la presión en la cabeza. Es como una bocanada de frescura que te reanima en segundos.
4. Baños aromáticos
Si lo que necesitas es un momento de desconexión total, nada como un baño con aceites esenciales. Solo tienes que añadir de 5 a 10 gotas a la bañera (previamente mezcladas en una base como leche corporal, sal de Epsom o aceite portador para que se disuelvan correctamente). El agua caliente ayuda a liberar el aroma y los compuestos beneficiosos del aceite, potenciando sus efectos relajantes o revitalizantes.
Es una forma increíble de terminar el día o de darte un respiro cuando el cuerpo y la mente lo necesitan.
5. Vaporizaciones
Una técnica tradicional pero muy efectiva, especialmente en épocas de frío o congestión. Consiste en añadir unas gotas de aceite esencial (como eucalipto o menta) en un recipiente con agua caliente. Luego, colocas la cabeza sobre el recipiente, la cubres con una toalla e inhalas el vapor durante unos minutos. Esto ayuda a abrir las vías respiratorias, aliviar la sinusitis y despejar la congestión nasal.
Yo lo hago mucho en invierno, especialmente cuando empiezo a sentirme resfriado. Un par de sesiones de vapor con eucalipto y, literalmente, respiro otro aire.
Aceites esenciales más comunes y para qué sirven
Aquí te dejo una lista con algunos de los aceites más usados y sus propiedades principales. Si estás empezando, este resumen te servirá como guía rápida:
Lista de aceites esenciales: los 100 más usados en aromaterapia y para qué sirven
Estos 100 aceites esenciales representan los más usados y versátiles en la aromaterapia actual. Desde los clásicos relajantes hasta los más efectivos para el sistema respiratorio, digestivo o inmunológico, esta guía cubre lo esencial para cualquier amante de los aromas y los aceites esenciales.
Aceite Esencial | Propiedades Aromáticas | Beneficios para la Salud | Métodos de Uso Recomendados |
---|---|---|---|
Albahaca (Ocimum basilicum) | Dulce, herbáceo, ligeramente especiado y fresco | Estimulante mental, alivia el dolor muscular, digestivo, antiespasmódico | Difusión, inhalación directa, masaje diluido |
Ajedrea (Satureja montana) | Picante, herbal, con notas cálidas | Antibacteriano, antifúngico, antiviral, inmunoestimulante | Uso tópico diluido (con precaución), no recomendado en difusión prolongada |
Anís estrellado (Illicium verum) | Dulce, licoroso, similar al anís, cálido | Carminativo, antiespasmódico, digestivo, expectorante | Difusión ocasional, masaje abdominal muy diluido |
Apio (semilla) (Apium graveolens) | Especiado, cálido, terroso | Diurético, desintoxicante, antiinflamatorio suave, útil en artritis | Masaje diluido, baños aromáticos |
Artemisa (Mugwort) (Artemisia vulgaris) | Amargo, terroso, alcanforado, herbal | Estimula la menstruación, calma nervios, favorece los sueños lúcidos | Uso tópico en zonas puntuales (muy diluido), almohadas aromáticas (con precaución) |
Árbol del té (Tea Tree) (Melaleuca alternifolia) | Fresco, medicinal, ligeramente alcanforado | Antiviral, antibacteriano, antifúngico, cicatrizante, inmunoestimulante | Uso tópico diluido, difusión, limpieza del hogar |
Azahar (Neroli) (Citrus aurantium var. amara) | Floral, cítrico, dulce, embriagador | Calmante, antidepresivo, sedante, útil en ansiedad e insomnio | Difusión, inhalación directa, masaje, baño |
Bálsamo de copaiba (Copaifera officinalis) | Dulce, suave, resinoso, ligeramente amaderado | Antiinflamatorio potente, analgésico, regenerador de piel | Tópico diluido, difusión, uso interno (solo con guía profesional) |
Bálsamo de Perú (Myroxylon balsamum) | Vainillado, dulce, cálido, resinoso | Calmante de la piel, expectorante, cicatrizante, relajante emocional | Uso tópico muy diluido (puede causar sensibilización), en difusores con moderación |
Baya de enebro (Juniperus communis) | Fresco, leñoso, ligeramente dulce y resinoso | Depurativo, diurético, útil para celulitis, tónico nervioso | Masaje diluido, baños, difusión suave |
Benjuí (Styrax benzoin) | Dulce, balsámico, con notas a vainilla y caramelo | Calmante, reconfortante, cicatrizante, expectorante suave | Difusión, masajes diluidos, baños aromáticos |
Bergamota (Citrus bergamia) | Cítrico, dulce, ligeramente floral | Antidepresivo, relajante, digestivo, útil en piel grasa o acné | Difusión, tópico diluido (evitar sol por fotosensibilidad) |
Boldo (Peumus boldus) | Herbal, alcanforado, amargo | Estimulante hepático, digestivo, diurético | Uso limitado y con precaución, no recomendado en aromaterapia común (puede ser neurotóxico) |
Buchu (Agathosma betulina) | Fuerte, alcanforado, herbal con notas mentoladas | Antiséptico urinario, diurético, tónico | Muy limitado en uso, solo con orientación profesional |
Cajeput (Melaleuca cajuputi) | Fresco, alcanforado, similar al eucalipto | Expectorante, antiséptico respiratorio, analgésico muscular | Difusión, masaje diluido en pecho o músculos |
Cálamo (Acorus calamus) | Terroso, leñoso, ligeramente dulce y picante | Estimulante mental, digestivo | No recomendado en aromaterapia moderna (puede ser neurotóxico) |
Canela (corteza) (Cinnamomum verum) | Dulce, cálido, especiado, intenso | Potente antimicrobiano, estimulante, afrodisíaco | Uso muy diluido en tópicos localizados, difusión corta y moderada |
Canela (hoja) (Cinnamomum verum – hoja) | Especiado, menos dulce que la corteza, más herbal | Antiséptico, antifúngico, estimulante circulatorio | Uso tópico con extrema dilución, difusión con precaución |
Cardamomo (Elettaria cardamomum) | Dulce, especiado, fresco y suave | Digestivo, estimulante mental, afrodisíaco, expectorante suave | Difusión, masaje diluido (especialmente abdominal) |
Cedro del Atlas (Cedrus atlantica) | Amaderado, seco, terroso, cálido | Linfático, descongestionante, relajante, útil contra la caspa y caída del cabello | Difusión, masaje en cuero cabelludo, baños |
Cedro de Virginia (Juniperus virginiana) | Amaderado, suave, seco, cálido | Calmante, astringente, útil contra la caída del cabello, desodorante natural | Difusión, masajes diluidos, aplicaciones en cuero cabelludo |
Ciprés (Cupressus sempervirens) | Fresco, resinoso, seco, ligeramente picante | Tonificante circulatorio, antiespasmódico, calmante emocional, útil para varices | Difusión, masaje (especialmente en piernas), baño aromático |
Citronela (Cymbopogon nardus) | Cítrico, fresco, herbáceo | Repelente de insectos, antifúngico, desodorante, estimulante | Difusión ambiental, spray repelente diluido, tópicamente muy diluido |
Clavo de olor (Syzygium aromaticum) | Especiado, cálido, intenso | Antiséptico, analgésico (especialmente dental), antiviral, antioxidante | Tópico muy diluido (efectivo en dolor dental), difusión breve |
Clementina (Citrus clementina) | Dulce, cítrico, suave, alegre | Relajante, antidepresivo suave, armonizante emocional | Difusión, inhalación directa, tópicos diluidos (evitar sol) |
Coco (fraccionado) (Cocos nucifera, aceite portador) | Neutro, suave, ligero | Hidratante, calmante, mejora la absorción de aceites esenciales | Vehículo para diluir aceites esenciales, base para masajes |
Copaiba (Copaifera spp.) | Suave, resinoso, amaderado, dulce | Antiinflamatorio potente, analgésico, regenerador de piel, útil en dolores crónicos | Masaje diluido, aplicación tópica localizada, difusión suave |
Coriandro (cilantro, semilla) (Coriandrum sativum) | Dulce, especiado, herbal | Digestivo, antiespasmódico, estimulante mental, tónico | Difusión, masaje abdominal diluido, inhalación |
Cúrcuma (Curcuma longa) | Terroso, cálido, ligeramente especiado | Antiinflamatorio, antioxidante, estimula la digestión, útil en dolores articulares | Masaje diluido, uso tópico, compresas (con aceite portador) |
Davana (Artemisia pallens) | Dulce, afrutado, exótico, floral | Equilibrante hormonal, ansiolítico, afrodisíaco suave, armonizador emocional | Difusión, inhalación directa, tópico diluido (perfumería natural) |
Dill (Eneldo) (Anethum graveolens) | Herbal, fresco, ligeramente especiado | Digestivo, carminativo, antiespasmódico, relajante suave | Masaje abdominal diluido, difusión, compresas |
Elemi (Canarium luzonicum) | Cítrico-resinoso, fresco, alcanforado | Regenerador cutáneo, expectorante, equilibrante emocional | Difusión, masajes diluidos, aplicación en piel madura o dañada |
Eucalipto globulus (Eucalyptus globulus) | Fresco, intenso, alcanforado | Expectorante potente, antiviral, descongestionante, antiséptico | Difusión, inhalación directa, masajes en pecho (muy diluido) |
Eucalipto radiata (Eucalyptus radiata) | Suave, fresco, más dulce que el globulus | Expectorante, antiviral, más suave para niños y personas sensibles | Difusión, inhalación, tópico diluido (mejor tolerado) |
Eucalipto citriodora (Eucalyptus citriodora) | Cítrico, fresco, con notas verdes | Antiinflamatorio, repelente de insectos, útil para dolores musculares | Masajes diluidos, difusor ambiental, spray repelente |
Eucalipto azul (Eucalyptus bicostata) | Intenso, mentolado, fresco y profundo | Expectorante, antiinflamatorio, potente respiratorio | Difusión (en cortos periodos), masajes diluidos |
Hinojo dulce (Fennel) (Foeniculum vulgare dulce) | Dulce, anisado, cálido | Estimula la digestión, regula hormonas, galactogogo | Masaje abdominal (muy diluido), inhalación, difusor |
Incienso (Frankincienso) (Boswellia carterii) | Resinoso, profundo, cálido, con toques cítricos | Calmante, regenerador cutáneo, equilibrante emocional, inmunoestimulante | Difusión, uso tópico en piel madura, meditación |
Gaulteria (Wintergreen) (Gaultheria procumbens) | Dulce, mentolado, similar a la aspirina | Analgésico potente, antiinflamatorio, usado en dolores articulares y musculares | Solo uso tópico muy diluido, no en difusión, evitar en embarazadas |
Galbanum (Ferula galbaniflua) | Verde, terroso, resinoso, penetrante | Antiinflamatorio, regenerador celular, útil en cicatrices y heridas | Tópico diluido, difusión (uso menos común), sinergias en perfumería |
Geranio (Pelargonium graveolens) | Floral, dulce, ligeramente afrutado | Equilibrante hormonal, regenerador cutáneo, calmante emocional | Difusión, aplicación tópica diluida, masajes |
Jengibre (Zingiber officinale) | Cálido, especiado, terroso | Estimula la digestión, antiinflamatorio, útil en náuseas y dolores articulares | Masajes diluidos, inhalación directa, compresas calientes |
Grano del paraíso (Aframomum melegueta) | Picante, cálido, ligeramente cítrico | Estimulante digestivo, afrodisíaco suave, circulatorio | Uso tópico diluido (con precaución), sinergias en masajes |
Helicriso (Siempreviva) (Helichrysum italicum) | Dulce, herbáceo, con notas de miel | Antiinflamatorio potente, cicatrizante, regenerador cutáneo, útil en hematomas | Tópico localizado diluido, sinergias para piel, roll-ons |
Hiba (Thujopsis dolabrata) | Amaderado, fresco, suave | Antibacteriano, antifúngico, purificante ambiental | Difusión, baños aromáticos, tópicamente diluido |
Hierbabuena (Mentha spicata) | Dulce, mentolado suave | Digestivo, relajante, alivia gases y náuseas, útil en niños | Inhalación, masajes abdominales, difusor |
Hierba limón (Lemongrass) (Cymbopogon flexuosus) | Cítrico fuerte, fresco, herbal | Antiinflamatorio, antimicrobiano, tónico circulatorio, desodorante | Difusión, masajes diluidos (puede irritar piel sensible) |
Hinojo amargo (Foeniculum vulgare amara) | Similar al dulce, pero más intenso y herbal | Carminativo, digestivo, estimula apetito | Tópico muy diluido, no en embarazadas o niños, uso limitado |
Hoja de canela (Cinnamomum verum) | Especiado, cálido, penetrante | Antimicrobiano, estimulante, afrodisíaco, potente tónico | Uso muy diluido, solo tópico localizado o en difusor en bajas dosis |
Ho Wood (madera de alcanfor) (Cinnamomum camphora CT linalol) | Floral suave, amaderado, ligeramente dulce | Calmante, regenerador cutáneo, similar al aceite de palo de rosa | Difusión, masaje, cuidado facial (muy bien tolerado) |
Jazmín (Jasminum grandiflorum / Jasminum sambac) | Floral, exótico, dulce, embriagador | Afrodisíaco, ansiolítico, equilibrante emocional, antidepresivo | Difusión, inhalación directa, perfume natural, tópico diluido (en aceite portador) |
Jengibre silvestre (Zingiber zerumbet) | Terroso, cálido, con un toque floral especiado | Antiinflamatorio, tónico digestivo, estimula la circulación | Masajes, compresas calientes, difusión (uso menos común) |
Junípero (Enebro) (Juniperus communis) | Fresco, resinoso, amaderado | Diurético, depurativo, útil en celulitis y retención de líquidos | Masaje diluido, baños aromáticos, difusión |
Katrafay (Cedrelopsis grevei) | Amaderado, seco, ligeramente picante | Antiinflamatorio potente, analgésico muscular, tonificante | Tópico diluido en masajes, útil para dolores musculares |
Khella (Ammi visnaga) | Herbal, ligeramente dulce, medicinal | Antiespasmódico, útil en asma, tensión muscular y digestiva | Difusión moderada, masaje diluido (especialmente en pecho y abdomen) |
Laurel (Laurus nobilis) | Herbal, especiado, fresco | Antiviral, expectorante, estimulante mental, digestivo | Difusión, masajes en pecho y cuello, uso tópico diluido |
Lavanda angustifolia (Lavandula angustifolia) | Floral, dulce, herbáceo, calmante | Calmante, cicatrizante, relajante, antiséptico, equilibrante del sistema nervioso | Difusión, aplicación directa (bien tolerada), masajes, baño |
Lavandín (Lavandula × intermedia) | Similar a lavanda, más intenso y con un toque alcanforado | Relajante muscular, antiséptico, útil en dolores y contracturas | Masajes diluidos, difusión, uso tópico |
Lemon Myrtle (Backhousia citriodora) | Cítrico, fresco, intenso, más potente que la citronela | Antimicrobiano, antiviral, antifúngico, estimulante | Difusión (con moderación), limpieza natural, spray ambiental |
Limón (Citrus limon) | Cítrico, fresco, limpio, alegre | Refrescante, desintoxicante, estimula la concentración, inmunoestimulante | Difusión, inhalación directa, tópico diluido (fotosensibilizante) |
Lima (Citrus aurantiifolia) | Cítrico, fresco, suave, menos ácido que el limón | Energizante, desintoxicante, mejora la concentración | Difusión, inhalación, en bebidas (siempre en bajas dosis) |
Litsea cubeba (May Chang) (Litsea cubeba) | Cítrico, fresco, ligeramente dulce | Antibacteriano, desintoxicante, tonificante, antidepresivo | Difusión, masajes diluidos, baños aromáticos |
Mandarina verde (Citrus reticulata) | Dulce, afrutado, suave | Calmante, sedante, alivia el estrés, útil para niños | Difusión, masaje suave en la zona abdominal y pecho |
Mandarina roja (Citrus reticulata) | Dulce, afrutado, suave, similar a la mandarina verde | Relajante, mejora el ánimo, promueve la digestión | Difusión, uso tópico diluido, masaje |
Manzanilla alemana (Matricaria chamomilla) | Floral, dulce, ligeramente mantecosa | Calmante, antiinflamatoria, ayuda al sueño, alivia dolores | Inhalación, compresas, uso tópico (cuidado con piel sensible) |
Manzanilla romana (Chamaemelum nobile) | Floral, dulce, con notas herbales | Calmante, ansiolítica, antiinflamatoria, alivia cólicos | Masajes diluidos, aplicación tópica para piel irritada |
Mejorana dulce (Origanum majorana) | Dulce, especiada, cálida, similar al orégano | Relajante muscular, antiespasmódica, alivia el estrés | Masajes diluidos, baños relajantes, difusor |
Melisa (Toronjil) (Melissa officinalis) | Cítrico, fresco, floral, con notas de menta | Calmante, ansiolítica, mejora el sueño, alivia dolores de cabeza | Difusión, masajes suaves, té (siempre en dilución) |
Menta piperita (Mentha piperita) | Fresca, mentolada, fuerte | Estimulante, alivia dolores de cabeza, mejora la concentración | Inhalación, masaje en sienes, compresas frías |
Menta verde (Mentha spicata) | Suave, fresca, mentolada | Calmante, digestiva, alivia náuseas y dolores estomacales | Masajes diluidos, inhalación, en agua caliente (vapores) |
Mirra (Commiphora wightii) | Amaderada, balsámica, ligeramente dulce | Antiinflamatoria, cicatrizante, antimicrobiana | Difusión, aplicación tópica diluida, masajes |
Milenrama (Achillea millefolium) | Herbácea, floral, ligeramente amarga | Antiinflamatoria, cicatrizante, ayuda a la circulación | Aplicación tópica diluida, masajes para dolores musculares |
Mimosa (Mimosa tenuiflora) | Floral, dulce, ligeramente frutal | Calmante, antidepresiva, mejora la ansiedad | Masajes diluidos, difusión, aromaterapia para estrés |
Naranja amarga (Citrus aurantium) | Cítrica, fresca, ligeramente amarga | Sedante, ayuda a la digestión, antidepresiva | Difusión, masaje, aplicación tópica diluida |
Naranja dulce (Citrus sinensis) | Cítrica, dulce, cálida, afrutada | Relajante, sedante, ayuda a la digestión, promueve el buen ánimo | Difusión, en bebidas (diluir bien), masajes |
Niaouli (Melaleuca quinquenervia) | Fresco, medicinal, similar al árbol del té | Antibacteriano, antiviral, respiratorio, ayuda con infecciones respiratorias | Masajes diluidos, inhalación directa, vapores en baño |
Onagra (aceite portador) (Oenothera biennis) | Ligero, suave, ligeramente herbal | Hidratante, antiinflamatorio, útil para piel seca y sensible | Uso tópico diluido, aplicación en la piel (como aceite portador) |
Opopanax (Commiphora wightii) | Resinoso, balsámico, dulce | Antiinflamatorio, calmante, útil en trastornos respiratorios | Difusión, aplicación tópica diluida, masajes |
Orégano (Origanum vulgare) | Especiado, fuerte, cálido | Potente antimicrobiano, antiviral, mejora la inmunidad | Uso muy diluido, masajes para dolores musculares, difusión |
Pachuli (Patchouli) (Pogostemon cablin) | Terroso, amaderado, con notas dulces y almizcladas | Equilibrante emocional, afrodisíaco, antiinflamatorio | Difusión, masajes, mezclado en cremas o aceites portadores |
Palmarosa (Cymbopogon martinii) | Floral, fresca, similar a la rosa | Antibacteriano, regenerador celular, equilibrante para la piel | Masajes diluidos, cuidado facial, difusión |
Palo de rosa (Aniba rosaeodora) | Floral, dulce, amaderado | Regenerador celular, antiséptico, calmante emocional | Masajes diluidos, aromaterapia, cuidado de la piel |
Palo santo (Bursera graveolens) | Amaderado, dulce, ahumado | Energizante, purificante, alivia el estrés, limpia el ambiente | Difusión, meditación, baños relajantes |
Perejil (semilla o hoja) (Petroselinum crispum) | Herbal, ligeramente especiado | Digestivo, diurético, antiespasmódico | Masajes diluidos, en sinergia con otros aceites para digestión |
Petitgrain (Citrus aurantium) | Floral, cítrico, suave, fresco | Relajante, sedante, alivia el estrés y la ansiedad | Difusión, aplicación tópica diluida, masajes |
Picea (abeto negro) (Picea mariana) | Fresco, amaderado, resinoso | Estimulante respiratorio, tónico muscular, alivia dolores | Masajes diluidos, vapores, difusión |
Pimienta negra (Piper nigrum) | Caliente, especiada, picante | Estimulante circulatorio, analgésica, combate la fatiga | Masajes diluidos (cuidado con piel sensible), difusión |
Pino silvestre (Pinus sylvestris) | Fresco, amaderado, resinoso | Respiratorio, antiséptico, antiinflamatorio | Masajes diluidos, vapores, difusión |
Ravensara (Ravensara aromatica) | Fresco, herbal, ligeramente amaderado | Antiviral, estimulante inmunológico, respiratorio | Inhalación, masajes diluidos, difusión |
Ravintsara (Cinnamomum camphora CT 1,8-cineol) | Fresco, herbal, mentolado | Potente antiviral, respiratorio, antibacteriano | Difusión, inhalación directa, masaje en el pecho |
Romero (cineol, verbenona, alcanfor) (Rosmarinus officinalis) | Herbal, fresco, con notas de alcanfor | Estimulante mental, mejora la circulación, alivia dolores musculares | Difusión, masajes diluidos, compresas calientes |
Rosa damascena (Rosa damascena) | Floral, dulce, profunda, con toques de miel | Regenerador celular, calmante emocional, antienvejecimiento | Aplicación tópica (diluido), difusión, cuidado de la piel |
Rosa centifolia (Rosa centifolia) | Floral, suave, rica, dulce | Equilibrante emocional, hidratante, antienvejecimiento | Cuidado facial, aplicación tópica diluida, difusión |
Salvia esclarea (Salvia sclarea) | Herbácea, floral, ligeramente almizclada | Equilibrante hormonal, antiespasmódica, relajante muscular | Masajes diluidos, difusión, para aliviar cólicos menstruales |
Salvia officinalis (Salvia officinalis) | Herbal, ligeramente especiado | Estimulante, digestivo, mejora la concentración | Masajes diluidos, aromaterapia, cuidado respiratorio |
Sándalo (indio, australiano) (Santalum album / Santalum spicatum) | Amaderado, cálido, balsámico | Relajante, espiritual, antidepresivo, mejora la concentración | Difusión, meditación, masajes, cuidado de la piel |
Tagetes (Tagetes minuta) | Floral, herbal, algo cítrico | Antiinflamatorio, antimicrobiano, ayuda en problemas dérmicos | Masajes diluidos, cuidado de la piel, compresas |
Tangerina (Citrus reticulata) | Cítrica, dulce, fresca | Calmante, sedante, promueve la digestión | Difusión, masajes suaves, cuidado infantil |
Tomillo (linalol, timol, etc.) (Thymus vulgaris) | Cálido, especiado, herbal | Antibacteriano, antimicrobiano, respiratorio, ayuda a la digestión | Inhalación, masajes diluidos, en vapor de baño |
Vetiver (Vetiveria zizanoides) | Terroso, amaderado, cálido | Calmante, relajante, regenerador celular, útil en el estrés | Masajes diluidos, difusor, baños relajantes |
Errores comunes al usar aceites esenciales, y cómo evitarlos

Aunque los aceites esenciales son productos naturales, eso no significa que se puedan usar sin precauciones. Un error común es pensar que, por venir de plantas, no tienen efectos adversos. Pero al ser extractos altamente concentrados, deben usarse con cuidado, conocimiento y respeto. Aquí te explico los errores más frecuentes y cómo evitarlos para que tu experiencia con la aromaterapia sea segura, efectiva y gratificante.
1. Aplicarlos directamente sobre la piel sin diluir
Este es uno de los errores más peligrosos y lamentablemente muy común. Algunos aceites, como el orégano, la canela o incluso la menta, pueden causar irritaciones, quemaduras o reacciones alérgicas si se aplican directamente sobre la piel. Incluso los más suaves pueden resultar demasiado agresivos si no se diluyen.
Cómo evitarlo:
Siempre, sin excepción, diluye los aceites esenciales en un aceite portador antes de aplicarlos. Los más recomendados son el aceite de coco fraccionado, almendra dulce, jojoba o aceite de oliva. Una buena proporción para adultos es de 2 a 3 gotas de aceite esencial por cada cucharada de portador (aproximadamente una dilución del 2%).
2. Usar aceites de baja calidad
No todos los aceites esenciales son iguales. En el mercado abundan productos etiquetados como “esenciales” que en realidad son mezclas con fragancias sintéticas, disolventes o aditivos. Estos no solo pierden sus propiedades terapéuticas, sino que pueden causar efectos negativos al inhalarlos o aplicarlos.
Cómo evitarlo:
Invierte en marcas confiables. Busca en las etiquetas palabras como “100% puro”, “grado terapéutico” y verifica que el aceite tenga su nombre botánico (por ejemplo, Lavandula angustifolia en lugar de solo “lavanda”). Revisa que no tenga ingredientes añadidos ni perfumes artificiales. Si el precio es demasiado bueno para ser cierto… probablemente no lo sea.
3. No consultar contraindicaciones
Cada aceite esencial tiene propiedades y efectos distintos, y no todos son aptos para todas las personas. Algunos aceites están contraindicados durante el embarazo, la lactancia, en bebés o personas con ciertas condiciones médicas (como epilepsia, hipertensión, asma o alergias cutáneas).
Cómo evitarlo:
Antes de usar un aceite esencial nuevo, infórmate bien. Consulta con un profesional si estás embarazada, tienes alguna condición de salud o piensas usar aceites en niños pequeños. No todos los aceites son inocuos en todos los contextos, y lo natural no siempre es sinónimo de seguro.
4. Abusar de las cantidades
Con los aceites esenciales, más no siempre es mejor. Su alta concentración hace que con muy pocas gotas se obtenga el efecto deseado. Usar demasiado puede resultar en saturación aromática, dolores de cabeza, irritación de las mucosas o incluso efectos contraproducentes.
Cómo evitarlo:
Empieza siempre con dosis bajas. Para difusores, entre 4 y 8 gotas es más que suficiente. En mezclas para la piel, con 2–3 gotas diluidas es más que suficiente. Si no estás notando resultados, puede que el problema no sea la cantidad, sino el tipo de aceite o el método de aplicación.
5. Pensar que todos sirven para todo
Cada aceite esencial tiene su propia “personalidad química”. Algunos relajan, otros activan; unos son buenos para la piel, otros para el sistema respiratorio o digestivo. Pensar que cualquier aceite sirve para cualquier cosa puede llevarte a frustraciones o a usos ineficaces.
Cómo evitarlo:
Aprende las propiedades específicas de cada aceite. No todos calman, no todos energizan, no todos son antibacterianos. Por ejemplo, si necesitas concentración, la lavanda no será tan efectiva como el romero o la menta. Conocer para qué sirve cada uno te permitirá usarlos con más precisión y obtener mejores resultados.
¿Realmente funcionan? Mi experiencia con aceites esenciales en la aromaterapia
Cuando empecé a usar aceites esenciales, no lo hice con grandes expectativas. Fue más bien una mezcla de curiosidad y necesidad de encontrar algo que me ayudara a desconectar, a relajarme, a reencontrar algo de equilibrio en medio del caos diario. Hoy, después de años de probar, experimentar y aprender, puedo decir sin dudarlo: sí, los aceites esenciales funcionan. No son una solución mágica ni una cura universal, pero cuando se usan con consciencia y constancia, los resultados se sienten… y mucho.
Para mí, se han convertido en pequeños aliados que me acompañan a lo largo del día y que se adaptan a mis emociones, necesidades físicas y estados de ánimo. En lugar de “tomar algo” o “aguantar”, ahora tengo herramientas naturales que me ayudan a gestionar cómo me siento.
Uno de los primeros aceites que probé fue la lavanda. Y fue un antes y un después. En una etapa en la que el insomnio me estaba afectando profundamente, bastó con empezar a usarla en la almohada y en el difusor para notar el cambio. Dormía más rápido, más profundo, con menos vueltas en la cama y una sensación real de descanso al despertar. No me lo esperaba, pero ahí estaba: una simple flor convertida en descanso.
Después descubrí el aceite de menta. Al principio, lo usaba solo cuando me dolía la cabeza, aplicando una gota en las sienes (diluida, claro) o simplemente inhalando su aroma. Pero pronto me di cuenta de que también me ayudaba a despejarme, a reactivarme cuando estaba mentalmente saturado o físicamente agotado. Es una especie de «despertador natural» que me acompaña cuando necesito foco.
El incienso lo conocí en un contexto muy especial: una sesión de meditación. Desde entonces, su aroma me conecta con algo más profundo. Es casi como si me ayudara a hacer silencio interior, a poner pausa al ruido externo y encontrar claridad. Hoy en día, no puedo meditar sin él.
Cuando tengo días bajos, de esos en los que todo pesa más de lo normal, recurro a los cítricos. La bergamota y el limón se han convertido en mi impulso emocional. Basta con difundirlos en el ambiente o aplicar una gota en la muñeca para que esa nube gris comience a disiparse. Tienen esa capacidad de devolverme la chispa, de recordarme que puedo volver a brillar incluso en los días nublados.
En el plano físico, el árbol de té ha sido una solución eficaz para pequeños problemas en la piel: granitos ocasionales, picaduras, rojeces. También lo uso en mezclas para purificar el ambiente, especialmente si alguien en casa está resfriado o con molestias.
Y hablando de resfriados, no puedo dejar fuera al eucalipto. Me ha salvado incontables veces en invierno. Ya sea en vapores o en difusor, cuando empiezo a sentir congestión, actúo rápido.
Lo más poderoso de la aromaterapia, al menos para mí, es que no es una receta rígida ni un método cerrado. Es una práctica flexible, natural y profundamente personal. Lo que a mí me funciona hoy, puede que no sea lo que necesite mañana. Y lo que a ti te sirva, puede ser completamente distinto. Esa libertad de poder elegir, combinar y crear tu propio ritual es lo que la hace tan especial.
En resumen: sí, los aceites esenciales funcionan. No porque lo diga la ciencia (aunque también lo dice), ni porque estén de moda, sino porque lo vivo cada día. Y si estás empezando o te lo estás planteando, mi consejo es simple: prueba, explora y date permiso para encontrar tu fórmula. Porque cuando conectas con el aceite que tu cuerpo o tu alma necesita, lo sabes. Se siente.
Consejos finales para sacarle el máximo provecho a la aromaterapia

La aromaterapia es una experiencia que involucra los sentidos, las emociones y la conexión con uno mismo. Pero como toda herramienta poderosa, para sacarle el máximo provecho hay que usarla con intención, conocimiento y constancia. Aquí te dejo algunos consejos que, desde mi experiencia, pueden marcar la diferencia entre un uso superficial y uno realmente transformador.
1. Empieza con pocos aceites, pero bien elegidos
Es muy fácil dejarse llevar por la emoción y querer comprar 10 aceites de golpe, pero lo mejor es comenzar por tres o cuatro que cubran necesidades concretas: por ejemplo, lavanda para relajarte, menta para activarte, eucalipto para respirar mejor y árbol de té para cuidar tu piel o purificar el ambiente. Con esos ya puedes hacer muchísimo.
Con el tiempo, irás descubriendo qué aromas te funcionan, cuáles te hacen sentir mejor y cuáles no conectan contigo. La clave es explorar con calma, sin saturarte.
2. Invierte en calidad, no en cantidad
Cuando hablamos de aceites esenciales, la calidad lo es todo. Un aceite adulterado o con fragancias sintéticas no solo perderá su efectividad, sino que incluso puede causarte reacciones no deseadas. No necesitas tener una colección gigante, solo necesitas que los que tengas sean puros, seguros y de origen confiable.
Revisa siempre que la etiqueta indique “100% puro”, que no contenga ingredientes añadidos y, a poder ser, que incluya el nombre botánico de la planta. Sí, probablemente pagarás un poco más… pero vale cada gota.
3. Ten un difusor sí o sí
Si hay un accesorio imprescindible en aromaterapia, es el difusor. Te permite usar los aceites de forma cómoda y segura, y transforma por completo el ambiente de tu casa. Encender el difusor con lavanda por la noche, o con bergamota durante una tarde gris, puede cambiar tu energía en minutos.
Además, es una forma ideal de que todos en casa se beneficien de los aceites sin que tengas que aplicar nada directamente sobre la piel.
4. Lleva un diario de uso
Quizás te parezca exagerado, pero anotar qué aceite usaste, cómo lo aplicaste y cómo te sentiste después es una de las mejores formas de aprender y personalizar tu práctica. La aromaterapia es muy subjetiva: lo que a alguien le relaja, a otro le puede energizar.
Con un diario puedes detectar patrones, identificar qué combinaciones te funcionan mejor y evitar repetir errores. En pocas semanas verás cómo empiezas a conocer mejor tus propias respuestas y afinás tu intuición.
5. Sé paciente: a veces los efectos se notan con el tiempo
Aunque algunos efectos son inmediatos (como la frescura de la menta o el descanso con lavanda), muchos otros se van acumulando con el uso constante. No te frustres si no sientes cambios al primer intento. La clave está en la constancia, en ir integrando los aceites poco a poco, en hacerlos parte de tu día a día.
A veces basta con oler el aceite adecuado en el momento justo para que cambie tu perspectiva. Pero también hay procesos internos, emocionales o físicos, que requieren más tiempo y repetición.
6. Disfruta el proceso
La aromaterapia no es solo utilidad, también es disfrute, placer sensorial, conexión con lo natural. No lo veas como una tarea más en tu rutina, sino como un regalo que te haces a ti mismo. Ese momento en el que eliges el aceite que necesitas, lo aplicas con calma o enciendes el difusor, es un acto de cuidado consciente.
Permítete disfrutar del aroma, del silencio que lo acompaña, del bienestar que llega sin prisa pero sin pausa. Porque más allá de los beneficios específicos, la aromaterapia te invita a reconectar contigo. Y eso, en estos tiempos acelerados, ya es un lujo.
Preguntas frecuentes sobre aceites esenciales
Si estás comenzando con la aromaterapia, el aceite esencial de lavanda es una excelente opción para iniciarte. Es conocido por sus propiedades calmantes, por lo que es perfecto para aliviar el estrés, la ansiedad y promover un sueño reparador. Además, su versatilidad lo convierte en un aceite fácil de usar en diversos tratamientos y mezclas, como para aliviar dolores de cabeza o en difusores para crear un ambiente relajante. Su seguridad y eficacia lo convierten en uno de los más recomendados para quienes dan sus primeros pasos en el mundo de la aromaterapia.
Para asegurarte de que un aceite esencial es 100% puro y de alta calidad, revisa la etiqueta del producto. Un aceite esencial auténtico debe estar libre de aditivos, diluyentes o productos químicos. También es importante verificar la información sobre el origen de la planta, el método de extracción (como destilación al vapor o extracción en frío) y si tiene certificaciones, como orgánico. Los aceites esenciales de calidad suelen contar con una descripción detallada y pruebas de pureza para garantizar que no han sido alterados.
El uso de aceites esenciales en niños pequeños o durante el embarazo debe realizarse con cautela. Algunos aceites, como los de menta o eucalipto, son demasiado fuertes y pueden causar reacciones adversas en los más pequeños. Durante el embarazo, ciertos aceites pueden inducir contracciones o causar irritaciones en la piel. Por ello, es fundamental consultar a un profesional de la salud antes de usar aceites esenciales, especialmente si estás embarazada o deseas utilizarlos en niños menores de dos años. Siempre asegúrate de diluirlos adecuadamente y de usar los aceites adecuados para cada situación.
La principal diferencia entre un aceite esencial y un aceite vegetal radica en su origen y uso. Los aceites esenciales son extractos concentrados obtenidos de distintas partes de las plantas, como flores, hojas o raíces, y se utilizan principalmente en aromaterapia por sus propiedades terapéuticas. Estos aceites son altamente concentrados y tienen fines específicos como aliviar dolores, reducir estrés o tratar problemas respiratorios. Por otro lado, los aceites vegetales, como el de almendra o jojoba, son extraídos de las semillas, frutos o nueces de las plantas y se usan principalmente como base para diluir aceites esenciales o en cosmética y cocina.
La forma en que aplicas los aceites esenciales dependerá de los efectos que busques. Para efectos relajantes o de reducción de estrés, puedes aplicarlos en las muñecas, las sienes o en la planta de los pies, ya que estas áreas tienen una buena circulación y permiten que el aceite se absorba rápidamente. Si lo que buscas es aliviar problemas respiratorios, lo ideal es aplicar aceites como el de eucalipto o menta en el pecho o alrededor de las fosas nasales. Recuerda que los aceites esenciales deben ser siempre diluidos adecuadamente antes de la aplicación para evitar irritaciones.
Sí, se pueden mezclar varios aceites esenciales para crear sinergias que potencien sus beneficios. Por ejemplo, la mezcla de lavanda y menta es ideal para aliviar dolores de cabeza, mientras que la combinación de lavanda con rosa mosqueta es excelente para la relajación y el cuidado de la piel. Es importante conocer las propiedades de cada aceite antes de combinarlos y asegurarte de diluirlos adecuadamente en un aceite portador, como el de jojoba o almendra, para evitar irritaciones. Además, siempre prueba las mezclas en pequeñas cantidades para asegurarte de que no provoquen reacciones adversas.
Para mantener la efectividad de los aceites esenciales, es crucial almacenarlos correctamente. Deben guardarse en un lugar fresco, oscuro y seco, lejos de la luz directa y del calor, que pueden alterar sus propiedades. Los frascos de vidrio oscuro son ideales, ya que protegen los aceites de la exposición a la luz. También es importante asegurarse de cerrar bien los frascos después de cada uso para evitar que el aire entre en contacto con el aceite y cause su oxidación. Si se almacenan adecuadamente, los aceites esenciales pueden durar mucho tiempo sin perder sus propiedades.
Al comprar aceites esenciales por internet, asegúrate de que el vendedor ofrezca productos de alta calidad y pureza certificada. Verifica las reseñas y opiniones de otros compradores para conocer su experiencia con el producto. Es importante que la tienda proporcione información detallada sobre el origen de las plantas, los métodos de extracción utilizados y las certificaciones, como orgánicas. Además, revisa las políticas de devolución y los términos de servicio para asegurarte de que compras en una tienda confiable y transparente.
Algunos de los aceites esenciales más populares son el de lavanda, menta, eucalipto, árbol de té, rosa mosqueta y naranja. Cada uno de estos aceites tiene propiedades únicas y se utilizan en diferentes tratamientos. Por ejemplo, la lavanda es conocida por sus efectos relajantes, mientras que el aceite de árbol de té es muy eficaz en el cuidado de la piel gracias a sus propiedades antimicrobianas.
El aceite esencial de árbol de té es considerado uno de los más poderosos debido a sus propiedades antimicrobianas, antibacterianas y antifúngicas. Se utiliza ampliamente en la medicina natural para tratar problemas de la piel, como el acné, y en el cuidado capilar. Además, es muy popular por sus capacidades para purificar el aire y eliminar gérmenes en el ambiente.
Bibliografía recomendada sobre aceites esenciales y aromaterapia
Si te apasiona el mundo de los aceites esenciales y quieres profundizar aún más, estos libros son verdaderas joyas que todo amante de la aromaterapia debería conocer. Cada uno ofrece una perspectiva única, desde la seguridad clínica hasta el uso práctico en el hogar.
1. Essential Oil Safety – Robert Tisserand & Rodney Young: Considerada la guía más rigurosa sobre seguridad en aceites esenciales. Ideal para terapeutas, profesionales sanitarios y usuarios avanzados que deseen conocer contraindicaciones, toxicidad y aplicaciones clínicas basadas en evidencia.
2. The Encyclopedia of Essential Oils – Julia Lawless: Una obra esencial con más de 160 aceites descritos en detalle. Propiedades terapéuticas, usos prácticos, perfil aromático y aplicaciones específicas. Un clásico imprescindible para principiantes y expertos.
3. Aromatherapy for Health Professionals – Shirley Price: Este libro profundiza en la aplicación clínica de la aromaterapia dentro del ámbito sanitario. Muy usado en escuelas de naturopatía, enfermería integrativa y medicina complementaria.
4. The Complete Book of Essential Oils and Aromatherapy – Valerie Ann Worwood: Más de 800 fórmulas y remedios caseros organizados por temas. Desde bienestar emocional hasta cuidado del hogar o tratamientos específicos, es un libro extremadamente práctico y accesible para todos.
Esta bibliografía está basada en fuentes ampliamente reconocidas en la aromaterapia y en mi experiencia personal como profesional en este campo.
Referencias
- NAHA (National Association for Holistic Aromatherapy)
Sitio web oficial: https://naha.org
Ofrecen guías, recursos y listados de aceites esenciales recomendados por terapeutas certificados. - AIA (Alliance of International Aromatherapists)
Sitio web oficial: https://alliance-aromatherapists.org
Proporcionan estándares de práctica y una red global de profesionales de la aromaterapia. - Aromatics International
Sitio web oficial: https://aromatics.com
Tienda especializada en aceites esenciales, con recursos educativos sobre su uso. - Plant Therapy
Sitio web oficial: https://planttherapy.com
Una empresa conocida por ofrecer aceites esenciales de alta calidad, con información educativa adicional. - doTERRA
Sitio web oficial: https://doterra.com
Marca líder en aceites esenciales que promueve el bienestar a través de sus productos y recursos educativos.
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Saber qué aceites usar es solo el primer paso. Lo realmente transformador es saber cómo aplicarlos. Desde difusores para ambientes laborales hasta masajes relajantes o baños terapéuticos, los aceites esenciales tienen múltiples formas de uso que se adaptan a tu estilo de vida. En esta guía encontrarás las mejores maneras de aprovecharlos según tus necesidades.
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Aunque los aceites esenciales ofrecen grandes beneficios, su mal uso puede ser perjudicial, especialmente en bebés, mujeres embarazadas, personas sensibles o mascotas. Aprender cuáles son las contraindicaciones y cómo usar cada esencia de forma segura es clave para disfrutar de todos los beneficios sin correr riesgos. Consulta nuestra guía completa y protege lo que más quieres.
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